D. Arias
Peticiones
Actualizado: 23 nov 2021
El antiguo hombre de confianza de un viejo régimen camina solo por un parque. De pronto, un periodista lo aborda y le hace preguntas sobre su pasado. El hombre se sorprende. Visiblemente incómodo, prefiere no hablar de ello y menos con un desconocido. Por eso evade al periodista. Ofuscado, pide que por favor lo deje en paz. Al fin de cuentas, él solo obedecía órdenes cuando torturaba.
Un antiguo perpetrador de masacres se entrevista en una cárcel con los familiares de las víctimas. Ante el reclamo de estas, este procede a pedir perdón. Pero en su mente, estas deben anteponer su sentimiento patriótico y reconciliarse. Al fin y al cabo, él solo obedecía órdenes.
Sobre un terreno en disputa, dos grupos de reclamantes de tierras se dan cita. Un escuadrón antimotines los acompañan. La tierra es para el que la trabaja, dicen unos. La tierra es para el que la posee, dicen otros. Estas son nuestras escrituras, dicen unos. Sus escrituras son falsas, dicen los otros. Al final del día, un juez ordena el desalojo. El escuadrón antimotines procede en conformidad. Tal vez en unos años, algunos de ellos se vuelvan a dar cita. En un tribunal, quizás, unos cuantos arrepentidos dirán a otros que los perdonen. Que no fue intención de ellos. Que ellos solo obedecieron órdenes.